Newsletter Perinatal by Revista Perinatal Argentina - Febrero 2023
Carta Editorial Revista 7
Nuevamente muy cerquita de una nueva publicación que sale en Marzo. ¡Cómo explicar la ansiedad que nos inunda cuando estamos en pleno proceso de producción! Realmente es un logro para nosotras que tantas personas confíen en nuestro trabajo. Esta próxima revista contiene artículos de colegas, la mayoría de ellos, que pidieron publicar en la revista, mas algunas entrevistas llevadas a cabo por nosotras.
Este es un ejemplar muy particular, con un tema difícil de abordar. Les comparto un pedacito de la nueva publicación que es la Carta Editorial, de mi autoría, presentando lo que te puedes encontrar en la próxima publicación.
Carta Editorial: Los duelos perinatales
Esp. Lic Patricia Díaz
Directora y coordinadora editorial
Revista Perinatal Argentina
“Cuando el dolor cae sobre ti sin paliativos, lo primero que te arranca es la palabra.”
“Hablo de ese dolor que es tan grande que ni siquiera parece que te nace de dentro, sino que es como si hubieras sido sepultada por un alud. Y así estás. Tan enterrada bajo esas pedregosas toneladas de pena que no puedes ni hablar.”
Rosa Montero, La ridícula idea de no volver a verte (2013)
El pasado 15 de octubre del 2022 realizamos la Muestra sobre el Duelo Perinatal en una de las salas del Colegio de Psicólogas y psicólogos de nuestro distrito, (Mar del Plata, Bs. As. Argentina) el mismo día de su conmemoración. Llegué algo ansiosa, ya empezada la reunión, pero dispuesta a transitar lo que imaginaba iba a ser un encuentro difícil. Comencé a recorrer las fotos, el zoom interactivo con la Red Transdisciplinaria de Duelo Perinatal que ya estaba en curso. La música, escuchar a las familias narrando su experiencia, fue casi insoportable para mí. Una puntada en el estómago persistente me apartó del ese lugar y decidí cumplir otra función: recibiría en la puerta de entrada a quienes visitarían la muestra. Iba y venía, con la respiración entrecortada, secándome lágrimas que no podía evitar.
Recorrí las fotos varias veces más, con la angustia sentida en el pecho, el dolor empático reinaba para todas las personas que estaban allí. A cada quién se nos juega la historia en momentos así de movilizantes. Conforme pasaba el tiempo mi corazón empezó a relajarse, tomando el clima emocional del lugar que lejos de aventurarse desgarrador fue transformándose en serenidad. Estaba en el lugar indicado. Prendimos una vela conmemorativa, conversamos, nos sacamos fotos… en ellas había sonrisas sí, porque habíamos atravesado otro ritual, otro reconocimiento de los que ya no estaban, otorgándoles identidad a ellos y sus familias. Porque es necesaria la mirada del otro que te confirme con certeza qué es lo que está ocurriendo y lo que pasó.
Acuerdo con Rosa Montero en lo indecible que es este dolor, que enmudece porque no se encuentran las palabras para nombrar la muerte, en este caso de un hijo/a. ¿Y si pudieras hablar, quien te escucharía? Nosotras trabajamos para ello.
Tal vez tengas la misma sensación que yo, al recorrer los artículos de la revista. Son fuertes, pero también amorosos, están atravesados por esta cruda experiencia, pero constituyen un quehacer necesario en todas sus formas, desde el abordaje del duelo, lo que significa para la familia, para los profesionales, hasta la necesidad clara y urgente de contar con protocolos que permitan alojar la subjetividad reinante en esos momentos.
No es una advertencia. Es una oportunidad. Solo poniéndonos muy cerca de este dolor logramos entenderlo y también así dar lo que se necesita.
“transformar el dolor en amor”
“los padres como acompañantes del buen morir”
“donde se espera la vida, invade la muerte”
“la fotografía como registro corporal para evocar la memoria”
“darle lugar a la muerte para que no lo invada todo”
“¿Habrá lugar para la construcción del maternaje con la desaparición del cuerpo real del bebé?
“un hijo se aloja primero en el corazón, luego en el vientre y si la vida lo permite más tarde en los brazos. Pero su existencia es real desde el comienzo mismo.”
“los nacimientos sin vida también son sagrados”
“abrir la posibilidad de la resignificación simbólica de estas pérdidas”
“la falta de reconocimiento social y jurídico desautorizan el duelo gestacional”
“Para mí dar testimonio hoy es una forma de honrar la memoria de mi hijo”.
Estas son algunas de las numerosas frases que encontrarás en los artículos. Todos y cada uno intentan concientizar sobre la importancia de visibilizar estos duelos silenciados, minimizados o desautorizados por desconocimiento y por miedo, porque nadie sabe a ciencia cierta qué hacer con la muerte.
Acompañar es el requisito, alojar a esos bebés socialmente para que puedan tener su propia historia ya iniciada en el corazón de su familia. Porque si acaso la muerte de un hijo/a no existe cómo nombrarla, sí podemos otorgarle identidad y que constituya un eslabón más de la cadena generacional de esa familia y su contexto. Porque todos los embarazos cuentan.
Hacer algo concreto con la muerte ayuda y mucho. Cada persona que atreviese estos duelos encontrarán su hacer específico, pero la sociedad debe habilitarlo también, mostrarlo, darle lugar.
Cito nuevamente a Rosa Montero que escribió lo siguiente: “Los humanos nos defendemos del dolor sin sentido adornándolo con la sensatez de la belleza” . Y así es, en este número de Revista Perinatal Argentina abordamos un dolor que no encuentra el sentido pero lo hemos abordado bello para que tenga un significado.
Agradecemos a cada una de las personas que han colaborado en nuestra revista, por depositar su confianza en nosotras, que siempre recibimos con mucho desafío y compromiso.
Ya falta poco para compartir esta difícil pero bella publicación. Marzo está cerca y nosotras, de ustedes.